El proyecto Txarrena comienza a fraguarse como válvula de escape de Enrique Villarreal, más conocido como "El Drogas", a finales de los 80, terminando de coger forma en 1992. Quedando plasmado dicho año en un disco inencontrable actualmente y que, realmente exitoso (se llegaron a despachar más de 40.000 copias del mismo), acertó a mostrar como pocos la trastienda más íntima del legendario cantante de Barricada. El LP vio la luz en plena borrachera de éxito de la mítica banda, formación que estaba viviendo su primera gran época dorada.
17 años después, la convulsa y siempre efervescente cabeza de El Drogas ha decidido recuperar dicho nombre, y con la misma intención: hacer lo mismo que entonces. Volver a desahogarse al margen de la banda madre haciendo lo que mejor ha demostrado saber hacer en su ya dilatada carrera, rock & roll. Dar salida a sus canciones de sello más personal con una única diferencia respecto a lo hecho en el ya lejano 1992: partiendo de temas ya conocidos, los del citado primer disco.
La 1ª actuación de Txarrena en ésta, su nueva andadura, tuvo lugar en Pamplona en mayo de 2008, abriendo para Marea en un Anaitasuna lleno hasta la bandera. Sobre tan emblemático escenario el Drogas se presentó respaldado por Brigi Duque, frontman de Koma, a la batería, y por el Flako Trigenio y Txus Maraví, de La Lengua de Trapo ambos, al bajo y a las guitarras. Los orígenes de la remozada formación hay que buscarlos, años atrás, en una jam session organizada para conmemorar el 10º aniversario del prestigioso Certamen musical Villa de San Adrián –concretamente-, informal cita que reunió entre otros a El Drogas, al Flako y al vocacional y excelente baterista Brigi, quedando el primero maravillado por los mismos. En un proceso que, en parte, recuerda al de la formación del primer plantel de Barricada, Txus, como guinda del peculiar pastel montado por El Drogas, sería reclutado posteriormente, después de que éste le viese tocar, como invitado, en un concierto de Marti-K. Infatigable creador de canciones, incansable buscador de esencias y de todo tipo de sensaciones para darles forma de canción, el carismático Drogas, a punto de atravesar la barrera del medio siglo, ahí sigue, al pie del micrófono, como el magnífico corredor de fondo que es. Liándose cada noche el pañuelo (además de la manta) a la cabeza para seguir cruzando la barrera del sonido con su música.
En febrero de 2011 publicaría su segundo disco de estudio llamado "Azulejo Frio" y en diciembre de ese miksmo año el Drogas anunció su decisión de abandonar Barricada, cerrando así un ciclo de más de 30 años en la mítica banda navarra.