Empezó poniéndose el listón la mar de alto, forzando inevitables comparaciones con el primer Dylan a su paso y conectando su Suecia natal con los paisajes más agrestes de la americana, pero Kristian Matsson ha ido poco a poco asfaltando su propio camino y construyéndose una carretera que, a fuerza de bordear las autopistas más pobladas del folk, le ha acabado llevando a “The Wild Hunt”, álbum en el que vuelve a enarbolar su particularísima voz y la pone al servicio de unas canciones que revitalizan la canción de autor.
Curtido en la banda Montezumas y con dos trabajos como The Tallest Man On Earth, Matsson acaba de dar un nuevo paso la frente tras publicar “Sometimes Blues Is Just A Passing Bird”, EP en el que se estrena con la guitarra eléctrica y se cuelga una nueva medalla en su inmaculada pechera folk.