Francisco Javier Rodríguez Morales, conocido en la escena como Maka, es un rapero natural de Granada. Creció en Almanjayar, un barrio castigado por la pobreza que le enseñó todo lo que sabe, y que dejó una huella imborrable en su vida y en sus canciones.
El flamenco de su tierra natal se mezcla con hip hop, reggaeton, trap y otros ritmos, creando algo totalmente nuevo que rompe con los patrones del rap más purista. Con este mestizaje por bandera, el granadino no deja de ampliar horizontes y cada vez suma más y más seguidores de toda edad y condición.