Después de la desaparición de Dusminguet nace La Troba Kung-Fú con Joan Garriga en la cabeza. La idea de Joan Garriga en este proyecto se acerca más a la rumba catalana, la de los gitanos catalanes, la de Peret y el Pescadilla. Con un directo impresionante siguen deleitando con su fusión despreocupada pero comprometida.