Nacido en Estocolmo, Christian Smith, DJ y productor, ha pasado la última década trabajando sin descanso para llevar su amalgama de funky house y techno tribal a una audiencia global.
Aunque sueco de nacimiento, Christian pasó una buena parte de su juventud en Frankfurt, Alemania.
Eran comienzos de los ochenta y la música en ese momento era el primer electro, el soul, funk y la última música disco. Grupos como The SOS Band, Newcleus, bandas de funk como Cameo y temas como Fade to grey de Visage tuvieron una gran influencia en Christian. Su hemano y su hermana mayores le traían a casa las mixtapes de los DJs de los clubes más grandes, con música de los días previos al nacimiento del house. Esto fue en lo que se convirtió Christian.
En 1989, Christian se mudó a Nueva York, donde descubrió que, en paralelo a su influyente comunidad house, la ciudad que nunca duerme también contaba con una vibrante escena techno. Todos los primeros clubes de techno habían empezado en Nueva York, con Joey Beltram en The Limelight y un poco más tarde con Jeff Mills. Después de acabar el instituto en 1992, Christian se trasladó a Washington DC para estudiar Económicas en la universidad, y en su tiempo libre empezó a pinchar. Nunca soñó con que ser DJ pudiera convertirse en su auténtica carrera. Sin embargo, Smith empezó a pinchar en las grandes raves de Washington y Baltimore, enfrente de audiencias que iban de las 500 a las 3000 personas. No olvidemos que ésto eran los primeros años noventa, y su selección musical era algo diferente a lo que hoy es su imagen de marca de fusión de house y techno-funk; eran los días del trance y el techno. Christian pinchaba temas de sellos como Harthouse, R&S y Music Man.
Por supuesto, las primeras experiencias de Christian como DJ también jugaron un papel definitivo en su trabajo futuro, ya que conoció a su colaborador habitual, John Selway, en 1993. Selway, que pinchaba en el mismo circuito rave que Christian en aquella época, también trabajaba en la prestigiosa tienda Satellite Records de Nueva York, allí donde Smith compraba sus discos por correo desde Washington. John y Christian conectaron musicalmente y desde entonces decidieron formar equipo y crear algunos temas. Así nació el sonido Smith & Selway.
En 1994, Christian fundó el sello Tronic, y a pesar de haber editado tres discos que fueron muy bien recibidos, tuvo que aparcar el sello durante tres años para retomarlo en 1997. La razón por la que se produjo este parón fueron los estudios en la universidad de Christian en Washington, que le ocupaban todo el tiempo. En 1997 Smith ya se encontraba realmente inspirado para pinchar, y la música del momento le impulsó a trabajar de nuevo en serio en su sello Tronic. Al haber acabado sus estudios, Christian empezó a ir a Nueva York con más frecuencia para colaborar con John Selway, y ello se tradujo en EPs para Primate y Rotation, el sello de Dave Angel. El maxi de Smith de 1997, Goldrush, la cuarta referencia de Tronic, también tuvo una reacción importante, y este fue el punto en el que todo despegó. Tronic se convirtió en un sello popular, y Goldrush se licenció en todas partes. Era un tema de disco-house muy duro que pinchaban mucho artistas como DJ Sneak, y también fue la primera vez que un disco de Smith generaba un reacción tan grande por parte de tanta gente. DJs como Carl Cox o Dave Angel, gente que habían sido sus ídolos desde el principio, le dieron un apoyo real. Funcionó tan bien que cada mes Christian tenía que planchar más y más.
Durante los noventa, se centró en pinchar, producir y remezclar cuanto más mejor. Editó más EPs en Tronic, Intec y Primevil, y aunque uno de sus discos, Vanguard, llamó la atención y recibió el apoyo de la emisora BBC Radio 1 y del DJ Pete Tong, Smith sentía que tenía que trabajar más duro que nunca. Discos que traspasaron fronteras como Move!, en Intec, y sus lanzamientos en sellos como Rotation abrieron su trabajo a un montón de gente.
Christian disfruta mucho en Asia y Europa del Este, y son sus nuevas zonas favoritas para pinchar. En una gira reciente por el Sudeste Asiático, tuvo fechas increibles en Corea del Sur, Kuala Lumpur y en el Ministry of Sound de Bangkok. Japón es un lugar en el que Christian tiene muchos seguidores gracias a sus sesiones magistrales en el Womb de Tokio.