Este cantautor cómico, mallorquín de sangre andaluza, a pesar de haber estudiado empresariales, animado por quienes le veían interpretar sus primeras creaciones en acampadas y reuniones de amigos, decide dejar su ocupación como camarero y centrarse en hacer lo que más le gusta, actuar.
Así, tras tres años rodando su espectáculo por diversos lugares, llega a Madrid, donde consigue hacerse con un público cada vez más numeroso. El dúo radiofónico Gomoaespuma populariza sus canciones, convirtiendo en verdaderos `hits´ temas como El Menú del bar Rambo, El busto es mío o La quiero.
Su particular manera de explicar sus historias en forma de canción ha calado hondo entre sus incondicionales.