Lujuria se formó en la ciudad de Segovia a principios de los 90 como una banda que revolucionaría los esquemas del heavy metal nacional con su fusión de textos sexuales y ritmos contundentes. La mayoría de sus letras hablan del sexo, a veces en serio y a veces con tono humorístico, algo que no les ha impedido implicarse seriamente con toda clase de causas sociales.
Lujuria llevan 15 años conservando una identidad propia dentro del heavy metal estatal. Siete grabaciones en estudio avalan un historial comprometido con unos esquemas que solo variaron con la publicación de su anterior obra, Y La Yesca Arderá, un trabajo conceptual cuya temática les alejaba de sus habituales “lujurias”. Con Licantrofilia (2008), retornan a los parámetros más reconocibles de su trayectoria, aunque se adivina una mayor variedad en la cobertura de los textos.