Great Lake Swimmers es una banda musical de indie folk pastoral liderada por el cantautor Tony Dekker. Su música se caracteriza por un folk melódico y minimalista, y su estilo ha sido comparado con Red House Painters, Nick Drake, Will Oldham, Gram Parsons, Sufjan Stevens, Iron & Wine o Neil Young, entre otros.
En un todavía cercano 2003, la banda nació en Wainfleet, en el estado de Ontario, Canada. Great Lake Swimmers esta liderado y tiene como cabeza pensante, al magnifico cantante Tony Dekker. Una de las particularidades de la banda es la costmbre de grabar siempre que puede en antiguas iglesias, salones comunitarios, centros de arte, silos abandonados y toda clase de lugares rurales e históricos.
La música de esta banda se caracteriza por un folk melódico, etéreo y minimalista. Son como unos nuevos The Band de este milenio. Provienen de las mismas tierras de la mítica banda de Levon Helm y dominan los banjos, mandolinas, guitarras, bajo, violines, violonchelos, harmónicas, órgano, como nadie ahora mismo. Además saben estructurar perfectas armonías.
Cada nuevo disco de Great Lake Swimmers es otra mirada a la americana a cámara lenta, vuelve a sugerir altas montañas, ríos amplios y caudalosos, lluvia repiqueteando en la ventana y búsqueda trascendental del espíritu en todo lo que nos rodea, abrazar la naturaleza y la transparencia de su devenir, y con algunas canciones situándonos en la pequeñez de la situación en la que estamos, es inevitable. Great Lake Swimmers no sorprenden y hay que dar gracias a que no lo hagan, porque lo suyo no es hacer que ningún estilo arraigado en la cultura americana avance, para eso ya tenemos a My Morning Jacket y Iron&Wine. Ni dar otra vuelta de tuerca, eso lo dejaremos a los mecánicos. Ellos siempre estuvieron en el mismo camino de donde los Fleet Foxes se llevaron todas las flores, pero a diferencia de ellos Tony Dekker domina mejor los elementos de la naturaleza que el propio Robin Peckold.
En 2012 publican "New Wild Everywhere". Entran en el estudio dejando atrás sus registros en espacios amplios y reverberantes, elemento principal en su obra anterior. Ahora suenan más cercanos y acústicos, aunque curiosamente continúan sonando etéreos. Todo lo que pueda sugerir el título con respecto a su sonido no es del todo literal. De salvaje tiene el paisaje que pintan los versos, hay algunos cambios pero no alteran su esencia. Algunas canciones suben el tempo y dan otra perspectiva diferente, como Easy Come Easy Go, cercano al pop de Harrison cuando rasgaba su acústica, o la canción que da título al disco, o la alegre y optimista Changes with the Wind. En la instrumentación el banjo y el violín refuerzan su base folkie, el banjo suena relajado y dulce en Ballad of a Fiherman's Wife, canción protesta encubierta de oda a las familias afectadas por el vertido de petróleo en las costas de Louisiana. Como curiosidad, una de las canciones, The Great Exhale, fue la única grabada fuera del estudio en una estación de metro abandonada, eso no quitó que tuvieran que estar atentos a los horarios grabando las partes en las primeras horas de la mañana cuando los trenes aun dormían. Un gran contraste respecto de sus anteriores discos, de la naturaleza al subterráneo del metro de Toronto.