Era 1998 cuando "Er Migué" y "Er Canijo" iniciaron su andadura en la música desde su Jerez de la Frontera natal para el mundo. Tres años después Los Delinqüentes lanzaban su primer disco, con el que cosecharon un gran éxito de crítica y público, gracias en parte a la curiosa fusión de rumba y pop con toques de blues y funky de la que hacía gala. Con temas como "La Primavera Trompetera" o "El Aire de la Calle" se convirtieron en una banda destacada incluso para las radiofórmulas, pero eso sí, sin perder ese espíritu callejero (garrapatero como le dicen sus fans) que les diferenció del resto.
A finales de 2012 Los Delinqüentes se separan temporalmente para comenzar proyectos paralelos. Y así, Marcos del Ojo comienza una nueva etapa en solitario como El Canijo de Jerez, aunque bien acompañado por su banda Los Fumadores Galácticos. Comediante, guitarrista y trovador, El Canijo sigue componiendo y cantando himnos callejeros, cargado de chispa, compás y necesarias dosis de positivismo.