El 2024 fue un año lleno de emociones para los amantes de la música en España, con festivales que brillaron por su excelencia y otros que dejaron mucho que desear. Desde momentos inolvidables en escenarios icónicos hasta problemas logísticos que hicieron arder las redes sociales, repasamos los puntos más altos y bajos de la temporada festivalera.
Los reyes del 2024
Entre los más destacados, el Primavera Sound reafirmó su posición como referente internacional gracias a un cartel impecable y una organización que roza la perfección. Por su parte, el FIB y el Mad Cool Festival ofrecieron experiencias inolvidables, atrayendo a miles de asistentes con artistas de renombre y ambientes únicos. El Sónar Festival continuó sorprendiendo con su apuesta por la innovación electrónica y las artes digitales, mientras que el Bilbao BBK Live ofreció música de primer nivel en un entorno natural incomparable.
El lado oscuro: los tropiezos de 2024
No todo fue música y alegría. El Costa Feira, uno de los eventos más esperados del año, se convirtió en un auténtico caos por problemas de organización, largas colas y cancelaciones inesperadas en dos de sus días programados. Las críticas no tardaron en llegar, situándolo entre los peores festivales del año.
Además, otros festivales enfrentaron problemas como inclemencias meteorológicas y fallos logísticos, que dejaron a más de un asistente con un mal sabor de boca.
Conclusión
El 2024 dejó claro que los festivales siguen siendo el alma del verano español, aunque no todos logran estar a la altura de las expectativas. Mientras unos consolidan su legado como imprescindibles, otros tienen mucho que mejorar en sus próximas ediciones.
¿Qué festival será el próximo gran éxito o el mayor fiasco? La temporada 2025 está a la vuelta de la esquina, y la competencia promete ser feroz.
