Gijón se mueve una vez más. Y de nuevo de la mano de la electrónica más experimental, siguiendo con la tónica de los prestigiosos festivales L.E.V. o Trendelenbourg. En esta ocasión, la cabeza pensante detrás del proyecto Black Mirror Festival es el polifacético Javier Bejarano, artista multidisciplinar y uno de los agitadores de la escena cultural gijonesa. Ambient, drone y psicodelia llenarán la magnífica cúpula de la iglesia de la Universidad Laboral, con el apoyo de los visuales de Nazaré Soares y P3RP. Toda una experiencia para los sentidos a la que se tendrá acceso de forma gratuita.